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Los puntos de hidratación, también llamado centros de hidratación o zona de hidratación, son lugares al cual los trabajadores acuden a reponer los líquidos perdidos durante su jornada laboral.
Es importante estar atento a la salud de los trabajadores, como lo estipula la NOM-030-STPS-2009, Servicios preventivos de seguridad y salud en el trabajo-Funciones y actividades, y la hidratación es parte de la salud y de las medidas preventivas que demos de tomar en cuenta a la hora de hacer nuestro diagnostico de seguridad y salud en el trabajo. Sobre todo en territorio nacional que supere los 25°C al año de temperatura ambiental. Algunos estudios han constatado un aumento del 30% de los accidentes laborales en temperaturas superiores a 24°C.
Una correcta hidratación puede prevenir muchos accidentes laborales y situaciones de bajo rendimiento, así como mejorar la sensación de bienestar de los trabajadores.
Recordemos que entre el 55% al 60% de nuestro peso corporal esta constituido por agua, de la cual el 50% esta en nuestros músculos, el 20% en la piel, el 10% en la sangre y el resto en los demás órganos como las viseras y los huesos. La cual perdemos constantemente a través del sudor, saliva, respiración, orina, entre otros.
La ingesta de agua debe de ser periódica y constante durante el día, intentado equilibrar las perdidas. Estas la reponemos a través del agua y los alimentos, sobre todo en frutas y verduras.
¿Qué es la deshidratación?
La deshidratación se produce cuando se pierde más agua y electrolitros como sodio y potasio de la que se ingiere, es decir cuando nuestro balance hídrico es negativo. En condiciones normales el cuerpo pierde de 2 a 2.5 litros de agua al día, el cual debe de reponerse.
Existen 3 tipos diferentes de deshidratación:
Deshidratación Isotónica: se produce cuando perdemos aproximadamente la misma cantidad de agua que de electrolitos, principalmente en presencia de vomito y /o diarrea, o ingesta insuficiente.
Deshidratación Hipertónica: en este tipo de deshidratación la pérdida de agua es superior a la pérdida de sal, es decir, se pierde proporcionalmente más agua que sodio, lo que puede ocurrir debido a una ingesta de agua insuficiente, a un exceso de sudor, a diuresis osmótica y a la ingesta de medicamentos diuréticos. Se caracteriza por un intercambio osmótico de agua desde el líquido intracelular al líquido extracelular.
Deshidratación Hipotónica: tiene lugar cuando nuestro organismo pierde más electrolitos que agua. Se caracteriza por un intercambio osmótico de líquido desde la región extracelular a la región intracelular. También se produce cuando se ingiere demasiada cantidad de agua u otros líquidos sin ningún o con muy poco contenido de sodio. Esta complicación puede producir la muerte si conlleva una inflamación que causa presión en el cerebro (edema cerebral). Este tipo de deshidratación se conoce como hiponatremia. (CIEAH, 2022)
Signos de una deshidratación:
Boca seca
Cefalea (dolor de cabeza)
Fatiga o debilidad
Sensación de mucha sed
Piel seca
Mareos
Calambres musculares
Piel seca y / o fría
Nauseas
En casos más graves
Taquicardia (incremento del ritmo cardíaco)
Dificultad para respirar
Adormecimiento de las extremidades
Confusión mental
Perdida de la conciencia
Labios azulados
Espasmos musculares
Delirios
Lengua hinchada
El cuerpo humano puede llegar a perder hasta el 10% del peso corporal en forma de agua. Una deshidratación superior al 10% del peso corporal requiere asistencia médica para poder recuperarse. La deshidratación contribuye a poner la vida en peligro en caso de golpe de calor. Las pérdidas superiores al 11% del peso corporal suelen ser incompatibles con la vida.
Deshidratación en los trabajadores:
El nivel de perdida hídrica dependerá del tipo de actividades que realice el trabajador, y las condiciones a las que esta expuesto ambientalmente (entre otros factores como la edad, sexo, masa muscular, etc).
"La eliminación del sudor durante un esfuerzo físico realizado a temperatura elevada puede superar la cantidad de 2 Litros por hora con una pérdida adicional de sodio de 35 a 50 mmol/l (0,8 g/l a 1,1 g/l). En pérdidas de agua de ese calibre es importante sustituir no sólo el agua sino también el sodio y otros electrolitos para prevenir la hiponatremia, una afección grave en la que el nivel de sodio en la sangre llega a niveles demasiado bajos. Los expertos sanitarios recomiendan que los deportistas que participen en competiciones de resistencia de más de dos horas de duración consuman bebidas para deportistas con sodio, potasio y carbohidratos.
La sed es una señal fisiológica que alerta a la persona de la necesidad de ingerir agua para recuperar el balance hídrico. Este mecanismo es una guía adecuada para ingerir agua excepto en los bebés, deportistas, trabajadores que realizan actividad física o trabajan en altas temperaturas y la mayoría de las personas enfermas y ancianas. En estos casos, conviene programar momentos y formatos para ingerir agua u otras bebidas o líquidos. La sed puede aparecer con una pérdida de tan sólo el 2% del peso corporal.
El agua total ingerida procede aproximadamente en un 20-30% del agua de los alimentos y el 70-80% restante de diferentes líquidos. Estas cifras pueden variar mucho según la población y sus hábitos o estilos de vida.
La National Academy of Sciences de EE.UU. ha establecido una ingesta adecuada diaria de agua entre 3,7 y 2,7 L para hombres y mujeres respectivamente, mientras que la European Food Safety Authority (EFSA) la fija en 2,5 a 2 L. En ambos casos, las cantidades pueden variar por otros factores como la situación fisiológica, las condiciones ambientales y la práctica de una actividad física o deporte. Por ejemplo, un hombre sedentario necesita entre ~1,2 y ~2,5 L, cantidad que llega hasta los ~3,2 L si practica una actividad física moderada. Los hombres activos que viven en ambientes cálidos tienen necesidad de ingerir ~6 L y los que, en las mismas condiciones ambientales, son muy activos, deben aumentar esa cantidad." (FUNDADEPS, 2012)
Hay que tomar en cuenta que en el trabajo industrial existen dos principales factores que pueden afectar a la hidratación del trabajador: la ropa de protección encapsulada que puede elevar los índices de sudor en 2,25 L/hora y el equipamiento de protección como las máscaras que pueden dificultar la ingesta de líquidos.
En Norteamérica, las asociaciones de seguridad y salud ocupacional siguen las pautas establecidas por la Conferencia Americana de Higienistas Industriales Gubernamentales (American Conference of Governmental Industrial Hygienists) (ACGIH), la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (Occupational Safety & Health Administration) (OSHA) y el Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional (National Institute of Occupational Safety & Health) (NIOSH). ACGIH y OSHA recomiendan reponer líquidos con agua fría y refrescos, y beber un vaso (250 ml) cada 20 minutos. NIOSH aconseja que los trabajadores expuestos a situaciones de calor en el trabajo tengan fácil acceso a cantidades suficientes de agua o bebidas no alcohólicas.
Efectos y consecuencias de la deshidratación en los trabajadores:
Rendimiento y la capacidad concentración disminuye
Mayor probabilidades de sufrir o generar un accidente
Aumento de enfermedades de vías urinarias
Mayor riesgo de caídas y desmayos
Estreñimiento
En trabajadores dietéticos puede elevar los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre.
Sufrir un golpe de calor, colapsar o incluso la muerte.
Afecciones intelectuales (memoria a corto plazo, atención, fatiga, facultades aritméticas, velocidad psicomotriz, rapidez de decisiones perceptivas…).
Los beneficios que tenemos al estar adecuadamente hidratado son:
Una correcta eliminación de las toxinas del cuerpo.
Equilibrio homeostático adecuado (regulación de nuestra temperatura, principalmente).
Buen funcionamiento de nuestros sistema digestivo.
Lubricación de nuestras articulaciones .
Regulación de nuestra presión arterial, y con ella una buena distribución de nutrientes a través de la sangre.
Señales de Puntos de Hidratación
Publicado por MEd. Julio Benítez, agosto 2022.
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