Radionúclido: "El núcleo inestable de un átomo debido a que su proporción de neutrones es mayor o menor al número de protones, y que al tender hacia el equilibrio emite radiación en forma de ondas o partículas."
Un radionúclido, también conocido como isótopo radiactivo o radioisótopo, es un átomo que contiene un núcleo inestable y emite radiación ionizante en forma de partículas subatómicas o radiación electromagnética (fotones) como resultado de su proceso de desintegración radiactiva. Los radionúclidos tienen una tasa de desintegración específica, conocida como actividad radiactiva, que se mide en unidades llamadas becquerelios (Bq) o curiosidades (Ci).
Aquí hay algunas características clave de los radionúclidos:
Núcleo inestable: Un radionúclido es un átomo cuyo núcleo es inestable debido a un desequilibrio entre la fuerza nuclear que mantiene unidos a los protones y neutrones en el núcleo y las fuerzas eléctricas repulsivas entre los protones cargados positivamente. Para alcanzar una configuración nuclear más estable, el núcleo emite radiación y se transforma en otro elemento o isótopo.
Tipos de radiación: Los radionúclidos pueden emitir diferentes tipos de radiación durante su desintegración, incluyendo partículas alfa (α), partículas beta (β), radiación gamma (γ) y en algunos casos neutrones libres. Cada tipo de radiación tiene sus propias características y efectos biológicos.
Vida media: La vida media de un radionúclido es el tiempo que tarda la mitad de una muestra de ese radionúclido en desintegrarse. Algunos radionúclidos tienen vidas medias muy cortas, de solo fracciones de segundo, mientras que otros pueden tener vidas medias de millas de años o más.
Aplicaciones: Los radionúclidos tienen numerosas aplicaciones en medicina, industria, investigación y otras áreas. Por ejemplo, se utilizan en medicina nuclear para diagnóstico y tratamiento, en pruebas de diagnóstico por imágenes, en esterilización de productos médicos y alimentos, y en datos por radiocarbono para determinar la antigüedad de objetos arqueológicos y fósiles.
Riesgos y seguridad: Debido a su capacidad para emitir radiación ionizante, los radionúclidos pueden representar un riesgo para la salud humana si no se manejan adecuadamente. Se toman medidas de seguridad, regulaciones y controles para minimizar la exposición a la radiación de los radionúclidos en entornos controlados y garantizar la seguridad de las personas y el medio ambiente.
Algunos ejemplos de radionúclidos conocidos incluyen el carbono-14 (utilizado en datación por radiocarbono), el yodo-131 (utilizado en medicina nuclear), el uranio-235 (utilizado en reactores nucleares) y el cesio-137 (producido en explosiones nucleares y accidentes nucleares). La elección de un radionúclido específico en aplicaciones particulares depende de sus características de radiación, vida media y propiedades químicas.