DEFLAGRACIÓN: "Explosión caracterizada porque la propagación de la llama está comprendida entre 1 m/sg y la velocidad del sonido 340 m/sg."
Una deflagración es un tipo de reacción química en la que una sustancia combustible se quema de manera rápida y sin una explosión violenta. En una deflagración, la combustión se propaga a través de la sustancia en cuestión, pero no se produce una onda de choque supersónica que caracteriza a las explosiones.
En una deflagración, la velocidad de la reacción de combustión puede variar, pero generalmente es mucho más lenta que en una detonación. Las deflagraciones son comunes en situaciones como incendios, donde el material combustible se quema gradualmente y la propagación de la llama es relativamente controlada. Por ejemplo, cuando un trozo de papel se enciende con un fósforo, está ocurriendo una deflagración.
En contraste, en una detonación, la reacción química se propaga a través del material explosivo a una velocidad supersónica, generando una onda de choque muy destructiva. Las detonaciones suelen ser mucho más peligrosas y explosivas que las deflagraciones.
Es importante entender la diferencia entre deflagraciones y detonaciones en situaciones donde se manejan materiales inflamables o explosivos, ya que la respuesta y las medidas de seguridad requeridas pueden variar significativamente en función de la naturaleza de la reacción.