El deterioro tonal de Carhart es un fenómeno audiológico caracterizado por una disminución en la percepción de los tonos puros en las frecuencias medias y altas en personas con alteraciones en la conducción ósea del sonido. Se observa en pacientes con pérdida auditiva de conducción y se manifiesta principalmente en las frecuencias de 500 Hz a 4000 Hz. Este fenómeno fue descrito por Raymond Carhart, un pionero en la audiología, y es de particular interés en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades del oído medio.
El deterioro tonal de Carhart se refiere a una disminución aparente en la percepción auditiva en la conducción ósea en pacientes con otosclerosis y otros trastornos del oído medio. Sin embargo, esta disminución no representa una verdadera pérdida neurosensorial, sino que se debe a alteraciones en la transmisión del sonido dentro del oído medio.
Este fenómeno se observa en una audiometría de conducción ósea como una elevación del umbral auditivo, lo que significa que el paciente requiere un estímulo más fuerte para percibir un sonido que normalmente podría escuchar con facilidad.
El deterioro tonal de Carhart se asocia comúnmente con:
Otosclerosis: Una enfermedad que causa fijación de la platina del estribo en la ventana oval, lo que reduce la conducción de vibraciones al oído interno.
Disfunción de la cadena osicular: Cualquier alteración en la movilidad de los huesecillos del oído medio puede afectar la transmisión del sonido.
Inflamación crónica del oído medio: Puede generar cambios en la transmisión del sonido, afectando la conducción ósea.
Cirugías del oído medio: Algunos procedimientos quirúrgicos pueden modificar la transmisión del sonido en la conducción ósea.
En la audiometría tonal liminar, los pacientes con deterioro de Carhart presentan:
Pérdida auditiva en conducción ósea entre 10-20 dB en las frecuencias de 500 Hz a 4000 Hz.
Mayor afectación en 2000 Hz, conocida como la "muesca de Carhart".
Después de una cirugía de estribo (estapedectomía), la audición ósea mejora, confirmando que la pérdida era una alteración de la transmisión del sonido y no un problema neurosensorial.
Para diagnosticar el deterioro tonal de Carhart se emplean varias pruebas audiológicas:
Se evalúan los umbrales auditivos por conducción aérea y ósea.
Se identifica una diferencia entre la conducción aérea y ósea (ventana ósea).
Se observa la muesca característica en 2000 Hz.
Evalúa la movilidad del tímpano y la cadena osicular.
En la otosclerosis, se observa una reducción en la compliance de la membrana timpánica.
En pacientes con otosclerosis, el reflejo estapedial suele estar ausente.
El deterioro de Carhart no requiere tratamiento específico, ya que desaparece tras la corrección quirúrgica de la causa subyacente, generalmente mediante una estapedectomía en casos de otosclerosis.
Otros enfoques incluyen:
Audífonos: En casos donde la cirugía no es viable, los audífonos pueden mejorar la audición.
Seguimiento audiológico: Para evaluar la progresión de la pérdida auditiva y la respuesta a tratamientos.
Cirugía de reconstrucción osicular: En casos de daño estructural en la cadena osicular.
El deterioro tonal de Carhart es un fenómeno audiológico importante en el diagnóstico de enfermedades del oído medio, especialmente la otosclerosis. Aunque simula una pérdida auditiva neurosensorial, es en realidad un artefacto de la conducción ósea alterada. Su detección mediante pruebas audiológicas permite diferenciarlo de otras patologías auditivas y su corrección quirúrgica (cuando es posible) lleva a una mejoría en la audición del paciente.